El despertar de la lectura violeta

Con motivo del Día de la Mujer celebrado el pasado 8 de marzo, me gustaría abordar uno de los temas que provoca más controversia a día de hoy. Hablar del feminismo es algo peliagudo, y mentiría si dijera que no me inquieta escribir sobre ello. Parece que la simple mención de la palabra provoque a algunos un sarpullido, y declararse feminista es tirarse de cabeza a una piscina de discusiones y malas miradas. Tengo mucho que investigar y aprender sobre el tema, pero unos cuantos meses de interesarme por esta causa me llevan a querer adscribirme a ella. Simplemente leyendo artículos y testimonios de feministas he aprendido una gran cantidad de cosas que sólo puedo calificar de positivas: las pautas para tener una relación romántica sana, los indicadores de abuso, la importancia del consentimiento… Me está ayudando a ser más positiva respecto a mi cuerpo y al de los demás. Poco a poco me veo más capaz de identificar los usos sexistas del lenguaje y la publicidad. Por esta última razón, me ha hecho mejor lectora.

Si hubiera leído Under Different Stars hace unos meses, el libro hubiera pasado sin pena ni gloria a la larga lista de títulos que he devorado en pocas horas y olvidado en cuestión de minutos: una historia original pero pobremente ejecutada. Sin embargo, el descarado sexismo con el que se trata a la protagonista me resulta difícil de ignorar.

Kricket es una adolescente que descubre que proviene de otro planeta y que posee habilidades especiales. Sabe si alguien está mintiendo, puede ver el futuro y tiene un coeficiente intelectual muy superior al de todos los que le rodean. Además, es descendiente de los dos clanes más poderosos del planeta, por lo que es una persona con gran poder político. Todas estas cualidades hacen que el resto de personajes (todos hombres) se interesen por tenerla de su parte. En un principio, los militares la quieren por el valor estratégico de sus poderes premonitorios y los nobles por su posición política. Sin embargo, hacia la mitad del libro todos han olvidado por completo sus intereses iniciales en favor de querer casarse con ella por el simple hecho de que es indescriptiblemente bella. Se desdeña el valor de sus numerosas habilidades para pasar a apreciarla simplemente por su físico.

Evidentemente esta no es la primera historia que trata así a sus protagonistas (tanto hombres como mujeres), ni será la última. Mi principal crítica a este libro es que el machismo que contiene es especialmente peligroso para el público al que va dirigido. Se puede encontrar en la sección de «jóvenes adultos» de una librería, lo que significa que chicos y chicas adolescentes lo leerán, normalizando en sus mentes estas actitudes y comportamientos. Saber que una niña de 13 años podría leer esta historia y de forma inconsciente considerar que su único valor como persona es el que puede tener para un hombre me inquieta sobremanera. Porque hace unos años, yo no hubiera pensado nada más allá, ni me hubiera planteado esto como una forma de machismo.

Y vosotros, ¿qué pensáis? Me encantaría conocer vuestras opiniones respecto a este tema, ¡dejádmelas en los comentarios!